
martes, 30 de septiembre de 2014
Evitar lamentos teatrales y rezar por quien sufre verdaderamente, pidió el Papa en su homilía de la misa matutina

"Cuidar a los ancianos que son la memoria y la sabiduría de un pueblo", peregrinos en Roma

Jugar en equipo para ser semillas de paz, superando la competencia, que es guerra

lunes, 29 de septiembre de 2014
Mensaje del Papa Francisco por la reapertura de la Basílica Catedral italiana de Gaeta

Etiquetas:
Radiovaticana
Con premura de ángeles y corazón de niño, fluye la comunicación y comunión con Dios en la liturgia de la semana

Etiquetas:
Radiovaticana
Peregrinos en la Plaza de San Pedro de la mano del Papa Francisco

Etiquetas:
Radiovaticana
La ignorancia en las Escrituras es ignorancia en Cristo, el Papa a los miembros de la Alianza Bíblica Universal

Etiquetas:
Radiovaticana
"La comunicación social es un bien de primera importancia", el cardenal Baldisseri en la homilia por la fiesta del patrono Radio Vaticano

Los perseguidos y los mártires de Albania recuerdan que nuestra fuerza reside en el amor de Cristo

Satanás presenta las cosas como buenas, pero quiere destruir a la humanidad, dijo el Papa en su homilía matutina

Papa Francisco para la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales 2015: «Comunicar la familia: ambiente privilegiado del encuentro en la gratuidad del amor»

Hacia el Sínodo de los Obispos

domingo, 28 de septiembre de 2014
Antes de la oración del Ángelus el Papa pidió oraciones por la próxima Asamblea Sinodal sobre la familia

"Los jóvenes dan fuerza y los ancianos robustecen esta fuerza", el Papa en la homilía de la misa con los mayores

Los ancianos son memoria y futuro para la Iglesia y la familia humana, nunca el descarte y la violencia, reitera el Papa

sábado, 27 de septiembre de 2014
Invitación a ‘La bendición de la larga vida’ con el Papa Francisco

"Fue un torrente de gracia", el Movimiento de los Focolares después de su encuentro con el Papa

Brindar la esperanza de Cristo al mundo que tanto la necesita. Eucaristía: sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de caridad, reitera el Papa

Nuevo protagonismo misionero en Albania

“Es importante que los países latinoamericanos se escuchen entre sí”, p. Paco Mughiro

La familia en Papa Benedicto XVI

viernes, 26 de septiembre de 2014
"En mi ciudad se han llegado a celebrar 500 bautizos un domingo", fiel llegada desde Luján, Argentina

Etiquetas:
Radiovaticana
“Salir con valentía hacia la humanidad herida”, el Papa al Movimiento de los Focolares

Cristo se comprende llevando la cruz como el Cireneo, dijo el Papa en su homilía de la misa matutina

jueves, 25 de septiembre de 2014
Jesús, es la Palabra de Dios que ilumina nuestros pasos

Paz duradera entre todos los pueblos, dignidad humana, lucha contra la pobreza, aliento del Papa a la ONU

"No a los cristianos vanidosos, son como una bola de jabón", el Papa en Santa Marta

Sucesión al Obispo de Ciudad del Este, Paraguay

miércoles, 24 de septiembre de 2014
¡Que no falte la ayuda de la Comunidad Internacional! Cercanía y apremiante llamamiento del Papa ante la epidemia de ébola en África

Perseguir el bien común

martes, 23 de septiembre de 2014
No compliquemos el Evangelio, escuchémoslo y vivámoslo, pidió el Papa Francisco en su misa matutina

"El viaje a Albania será breve pero intenso", P. Lombardi

Responder a los retos pastorales en Europa, con formas concretas y nuevas a la luz del Evangelio, evangelización y promoción humana, alienta el Papa

lunes, 22 de septiembre de 2014
La avaricia, la intolerancia y la ambición de poder alimentan el espíritu bélico
Especial la Voz del Papa (RV).- (Con audio) 00:29:39:98 “Viendo la belleza del paisaje de esta zona, en la que hombres y mujeres trabajan para sacar adelante a sus familias, donde los niños juegan y los ancianos sueñan… aquí, en este lugar, solamente acierto a decir: la guerra es una locura”.
Lo dijo el Papa Francisco el pasado 13 de septiembre en la homilía de la Misa celebrada en el ámbito de su una peregrinación al Cementerio monumental militar de Redipuglia, en la provincia italiana de Gorizia, para rezar por los caídos de todas las guerras con motivo del centenario del inicio de la Primera Guerra Mundial. - “Un aspecto particular de la maternidad de la Iglesia es que nos educa a través de las obras de misericordia. Como buena madre y educadora, ella se fija en lo que es esencial; y lo esencial, según el Evangelio, es la misericordia”.
Lo afirmo el Obispo de Roma en su catequesis de la audiencia general del pasado 10 de septiembre. Producción de María Fernanda Bernasconi (hispano@vatiradio.va). El programa especial “La voz del Papa", se transmite los lunes a las 15,00 UTC. 22 de septiembre
Etiquetas:
Radio Vaticana
jueves, 18 de septiembre de 2014
Enviados en comunión con los sucesores de los apóstoles a anunciar a Cristo y su amor por toda la humanidad, el Papa en la catequesis
Explicando el articulo del Credo que dice: “creo en la Iglesia católica y apostólica”, Francisco explicó: “La Iglesia, universal y misionera, cuenta con la asistencia del Espíritu Santo, que continuamente la hace salir de sí misma al encuentro de los hermanos y hablar las lenguas del mundo entero para comunicar a todos la alegría del Señor Resucitado.”
El sucesor de Pedro afirmó que “como miembros de la Iglesia, también nosotros participamos de su misión: somos responsables de la salvación de todos los hombres, y, por tanto, no podemos permanecer indiferentes o ajenos a la suerte de nuestros hermanos; además, el Espíritu Santo también actúa en nosotros para que no nos cerremos en posiciones unilaterales y procuremos siempre el entendimiento, la armonía, la “sinfonía” en la vida cristiana”.
El Vicario de Cristo pidió para los peregrinos a la tumba de los apóstoles Pedro y Pablo, que el Señor “los ayude a anunciar a Cristo, que ama a todos los hombres”.
(Jesuita Guillermo Ortiz de RADIO VATICANA).
Texto completo de la catequesis del Papa en nuestro idioma:
En el Credo decimos que la Iglesia es católica y apostólica. Es católica porque es universal: tiene la misión de anunciar la Buena Noticia del amor de Dios hasta los confines del mundo, enseñando todo lo necesario para la salvación.
Y es apostólica porque es misionera: como los apóstoles y en continuidad con ellos, ha sido enviada a preparar la venida del Señor, acompañando su palabra con los signos de la ternura y del poder de Dios.
La Iglesia, universal y misionera, cuenta con la asistencia del Espíritu Santo, que continuamente la hace salir de sí misma al encuentro de los hermanos y hablar las lenguas del mundo entero para comunicar a todos la alegría del Señor Resucitado.
Como miembros de la Iglesia, también nosotros participamos de su misión: somos responsables de la salvación de todos los hombres, y, por tanto, no podemos permanecer indiferentes o ajenos a la suerte de nuestros hermanos; además, el Espíritu Santo también actúa en nosotros para que no nos cerremos en posiciones unilaterales y procuremos siempre el entendimiento, la armonía, la “sinfonía” en la vida cristiana.
Saludo a los peregrinos de lengua española venidos de España, México, Panamá, Nicaragua, Argentina, Perú, Chile y otros países latinoamericanos. Pido al Señor que su visita a Roma, y en concreto a la tumba de los apóstoles Pedro y Pablo, los ayude a anunciar a Cristo, que ama a todos los hombres.
Texto completo de la catequesis del Papa
"La Iglesia católica y apostólica"
Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!
Esta semana continuamos hablando sobre la Iglesia.
Cuando profesamos nuestra fe, nosotros afirmamos que la Iglesia es “católica” y “apostólica”. Pero, ¿cuál es efectivamente el significado de estas dos palabras, de estas dos conocidas características de la Iglesia? ¿Y qué valor tienen para las comunidades cristianas y para cada uno de nosotros?
1. Católica significa universal. Una definición completa y clara nos es ofrecida por uno de los Padres de la Iglesia, de los primeros siglos, San Cirilo de Jerusalén, cuando afirma: “la Iglesia sin duda es llamada católica, es decir, universal, por el hecho que está difundida por doquier, desde uno al otro confín de la tierra; y porque universalmente y sin defección enseña todas las verdades que deben llegar a conocimiento de los hombres, ya sea con respecto a las cosas celestes que a las terrestres. (Catequesis XVIII, 23). Un signo evidente de la catolicidad de la Iglesia es que ella habla todas las lenguas. Y esto no es otra cosa que el efecto del Pentecostés (cfr At 2, 1-13): es el Espíritu Santo, en efecto, que ha puesto en condiciones a los Apóstoles y a la Iglesia entera para que hagan resonar para todos, hasta los confines de la tierra, la Buena Noticia de la salvación y del amor de Dios. La Iglesia así nació católica, es decir, “sinfónica” desde los orígenes y no puede ser otra cosa que católica, proyectada hacia la evangelización y al encuentro con todos. La palabra de Dios hoy se lee en todas las lenguas: todos tienen el Evangelio en la propia lengua. Para leerlo. Y vuelvo a lo mismo: es siempre bueno llevar con nosotros un Evangelio chiquito, para llevarlo en el bolsillo, en la cartera. Y durante la jornada leer un fragmento. Esto nos hace bien. El Evangelio está difundido en todas las lenguas porque la Iglesia, el anuncio de Jesucristo Redentor está en todo el mundo. Y por esto se dice que la Iglesia es católica: porque es universal.
2. Si la Iglesia nació católica, quiere decir que nació “en salida”, que nació misionera. Si los apóstoles se hubieran quedado ahí en el cenáculo, sin salir a predicar el Evangelio, la Iglesia sería solamente la Iglesia de aquel pueblo, de aquella ciudad, de aquel cenáculo. Pero todos salieron por el mundo desde el momento del nacimiento de la Iglesia; desde el momento que vino el Espíritu Santo. Y por esto la Iglesia nació “en salida”, es decir, misionera. Es lo que expresamos calificándola apostólica. Porque el apóstol es el que lleva la Buena Nueva de la resurrección de Jesús. Este término nos recuerda que la Iglesia, sobre el fundamento de los Apóstoles está en continuidad con ellos. Son los apóstoles que fueron y fundaron nuevas iglesias, han consagrado nuevos obispos. Y así en todo el mundo, en continuidad. Hoy, todos nosotros estamos en continuidad con aquel grupo de apóstoles que ha recibido el Espíritu Santo y luego fue “en salida” a predicar. La Iglesia es enviada para llevar a todos los hombres este anuncio del Evangelio, acompañándolo con los signos de la ternura y del poder de Dios. También esto deriva del evento del Pentecostés: es el Espíritu Santo, en efecto, que supera toda resistencia, que vence la tentación de cerrase en sí mismos, entre pocos elegidos, y de considerarse los únicos destinatarios de la bendición de Dios. Imaginémonos si un grupo de cristianos hace esto: “nosotros somos los elegidos, sólo nosotros”… al final, mueren. Mueren primero en el alma, luego morirán en el cuerpo porque no tienen vida, no son capaces de generar vida a otra gente, a otros pueblos. No son apostólicos. Y es precisamente el Espíritu Santo que nos conduce al encuentro con los hermanos, también hacia aquellos más distantes en todo sentido, para que puedan compartir con nosotros el amor, la paz, la alegría que el Señor Resucitado nos ha dejado como don.
3. ¿Qué comporta para nuestras comunidades y para cada uno de nosotros, ser parte de una iglesia que es católica y apostólica? En primer lugar, significa llevar en el corazón la salvación de toda la humanidad, no sentirse indiferente o extraños con el destino de muchos de nuestros hermanos, sino abiertos y solidarios para con ellos. También significa tener el sentido de plenitud, de lo completo, de la armonía de la vida cristiana, rechazando siempre las posiciones parciales, unilaterales, que nos encierran en nosotros mismos.
Ser parte de la Iglesia apostólica quiere decir ser consciente de que nuestra fe está anclada en el anuncio y en el testimonio de los mismos Apóstoles de Jesús. Está anclada allí, es una larga cadena que viene de allí; y por eso sentirse siempre enviados, sentirse mandados, en comunión con los sucesores de los Apóstoles, a anunciar, con el corazón lleno de alegría, a Cristo y su amor por toda la humanidad. Y aquí yo quisiera recordar la vida heroica de tantos, tantos misioneros y misioneras, que han dejado su patria para ir a anunciar el evangelio en otros países, en otros continentes. Me decía un cardenal brasilero que trabaja bastante en el Amazonas, que cuando él va a un lugar, a un pueblo del Amazonas, a una ciudad, va siempre al cementerio. Y allí ve las tumbas de estos misioneros, sacerdotes, hermanos, monjas, que han ido a predicar el Evangelio, apóstoles; y él piensa: todos ellos pueden ser canonizados ahora, han dejado todo para anunciar a Jesucristo. Demos gracias a Dios porque nuestra Iglesia tiene tantos misioneros, ha tenido tantos misioneros, y tiene necesidad de más aún, ¡agradezcamos al Señor por esto! Tal vez entre tantos jóvenes, chicos y chicas que están aquí, alguno tiene ganas de convertirse en misionero, ¡que vaya hacia adelante! ¡Es bello esto, llevar el Evangelio de Jesús! ¡Sean valientes!
Pidámosle entonces al Señor, que renueve en nosotros el don de su Espíritu, para que toda comunidad cristiana y todo bautizado sea expresión de la santa madre Iglesia católica y apostólica.
Traducción del italiano: María Cecilia Mutual, Griselda Mutual – Radio Vaticana
Etiquetas:
Radio Vaticana
Suscribirse a:
Entradas (Atom)