domingo, 18 de diciembre de 2016

La cercanía de Dios a la humanidad. Misterio de amor. Ángelus del Papa

(RV).- El Papa Francisco rezó el Ángelus con los miles de fieles y peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro. Antes de la oración mariana el Obispo de Roma se refirió a la liturgia del cuarto y último domingo de Adviento, caracterizada por el tema de la cercanía de Dios a la humanidad, poniendo de relieve a los protagonistas de este “misterio de amor”: María y José. “Dios se acerca también a nosotros con su gracia para entrar en nuestra vida”, subrayó el Obispo de Roma, quien luego se preguntó qué cosa hacemos nosotros ¿Lo acogemos o lo rechazamos?

“Como a María, que ofreciéndose libremente al Señor de la historia, se le ha permitido cambiar el destino de la humanidad, así también nosotros, acogiendo a Jesús y tratando de seguirlo cada día, podemos cooperar con su diseño de salvación sobre nosotros mismos y sobre el mundo”, constató el Papa.

El Santo Padre recordó también al otro protagonista del Evangelio de hoy: San José. “Acogiendo a María, José acoge conscientemente y con amor a Aquel que ha sido concebido en ella por obra admirable de Dios, para quien nada es imposible. José, hombre humilde y justo, nos enseña a confiarnos siempre en Dios, a dejarnos guiar por Él con voluntaria obediencia”.

Francisco pidió para que María y José, que han sido los primeros en acoger a Jesús mediante la fe, nos introduzcan en el misterio de la Navidad. “María nos ayuda a colocarnos en actitud de disponibilidad para acoger al Hijo de Dios en nuestra vida concreta, en nuestra carne. José nos insta a buscar siempre la voluntad de Dios y a seguirla con total confianza”, finalizó.

(RC – RV).

 


No hay comentarios.:

Publicar un comentario