(RV).- A la hora del Ángelus del III Domingo de Cuaresma el Papa Bergoglio recordó la invencible paciencia de Jesús, que invita siempre a la conversión.
– “Que el ejemplo de Jesús transforme nuestra concepción de poder para que siempre vivamos nuestra responsabilidad como un servicio, en el que manifestar su misericordia a los demás”.
– Fue el deseo que el Santo Padre manifestó al saludar en nuestro idioma a los fieles y peregrinos presentes en la Plaza de San Pedro que participaron en la audiencia general del último miércoles de febrero.
– Con la lectura de un pasaje del Antiguo Testamento, tomado del primer libro de los Reyes, que relata la vicisitud entre Nabot y Ajab, rey de Samaría – quien le pide su viña para hacer una huerta, a lo que le responde que no le dará herencia de sus padres – el Papa Francisco reflexionó en su catequesis sobre el tema de la Misericordia y poder.
(María Fernanda Bernasconi – RV).
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